La adaptación a la orografía del terreno con pequeñas montañas y valles definen el entramado urbano de estos pueblos serranos. Calles que se adaptan a las curvas de desnivel y que otorgan un carácter continuista con respecto a la naturaleza que les rodea.
El caserío se define por parcelas con viviendas de poca altura pero con soberado, con fachadas blancas de cal y tejados a dos o tres aguas, cubiertos por tejas árabes, con pequeños vanos. Dentro de estas parcelas también son importantes las zonas no destinadas a viviendas como los patios o corrales.
Este caserío suele estar salpicado por algunos elementos monumentales, con alguna vivienda señorial y sobre los que suelen destacar la iglesia y el castillo, en caso de que lo tengan. Referente a los espacios públicos destacan sus calles empedradas, los lavaderos y fuentes y sus plazas.
Otro elemento importantísimo de los pueblos de la Sierra es el ruedo o contorno del municipio. Se trata de pequeñas propiedades que en épocas pasadas surtían de alimentos a la localidad, por ello es normal que sean huertas, huertos de frutales, olivares… En definitiva, elementos que aseguraban la vida en las poblaciones.
Estas características las podemos ver en los veintinueve pueblos de la comarca, excepto en Rosal de la Frontera que, al ser el pueblo más joven de la comarca, su trama urbana responde a una población de tipo reticular, propia del momento en el que se fundó. El resto de municipios serranos tienen su origen en la Edad Media, bien en periodo de dominación musulmana (casos de Aroche o Zufre) o de periodo de dominación cristiana, que son la mayoría.
También será importante en la evolución de los conjuntos históricos el desarrollo socio-económico de las poblaciones: más agrícola, como Hinojales; o más industrial, como sucede en Jabugo o en Cumbres Mayores.
Altitud nivel del mar 577m
Extensión 41 km2
Gentilicio: Alajeños
Población: 800 habitantes
www.alajar.es
Alájar se encuentra enmarcado por bosques de castaños y alcornoques, destacando su maravilloso monumento natural, La Peña de Arias Montano. Este municipio, ubicado en el corazón del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, está rodeado de numerosas y encantadoras aldeas que se sumergen en la exuberante vegetación. Estas aldeas, siete en total —El Cabezuelo, El Calabacino, El Collado, Los Madroñeros, La Peña de Arias Montaño y San Bartolomé—, contribuyen a la belleza de Alájar.
Su riqueza en manantiales y fuentes ha dado forma a un lugar que ha sido preservado con esmero por sus habitantes, enriqueciéndolo con tradiciones y expresiones culturales de renombre en la Sierra. Destacando entre estas festividades, se encuentra la famosa Romería de la Reina de los Ángeles, considerada la celebración más importante y representativa de la región.Alájar ha sido reconocido como Conjunto Histórico Artístico, junto con La Peña de Arias Montano, mediante el Real Decreto 23/36 BOE de 30 de julio de 1982.
En términos históricos, en el siglo V, se dice que San Víctor vivió en La Peña, atraído por la belleza de la sierra. Los musulmanes la nombraron Alájar, cuyo significado etimológico es 'piedra'. Durante la Reconquista, Alájar fue territorio de disputa entre las coronas de Castilla y Portugal. En 1700, se le otorgó el título y la condición de Villa. La consolidación de Alájar se llevó a cabo en el siglo XVIII, diversificando su economía rural con un notable aumento en la actividad ganadera y comercial.
En cuanto a su patrimonio histórico y artístico, Alájar alberga varios lugares de interés, entre ellos:
Altitud nivel del mar 613m
Extensión 321 km2
Gentilicio: Almunienses
Población: 1785 habitantes
www.almonaster.es
Influencias Árabes
Almonaster, reconocido por su identidad cultural marcada, su entorno natural vigoroso y su singular población, representa un territorio con una personalidad propia que se manifiesta en los estilos de vida, costumbres y en el legado de su rico patrimonio.
Su extenso patrimonio islámico es el resultado evidente del paso de la comunidad musulmana por la región. Estos legados compartidos y restos históricos sirven de base para la celebración anual de la Cultura Islámica en Almonaster.
Los orígenes de Almonaster se remontan a un asentamiento religioso de la época visigoda cerca de la fortaleza actual, construido sobre restos romanos. Este lugar fue rápidamente ocupado durante el dominio musulmán, siendo la primera mención escrita de su existencia hecha por el geógrafo musulmán Abu Ubaid al Bakri en el año 822 d.C.
La ocupación musulmana dio lugar a la construcción de una mezquita en el siglo X y a una población confinada dentro del recinto amurallado. En 1267, Almonaster, junto con el resto de la Sierra, pasó a formar parte de la región bajo Sevilla, involucrándose en conflictos fronterizos con el reino de Portugal.
En el siglo XIX, el municipio pasó a depender administrativamente de la recién creada provincia de Huelva.
Patrimonio Histórico y Artístico
El castillo es un recinto amurallado que alberga en su interior la Mezquita. En el siglo XIX, parte de los materiales de sus murallas se utilizaron para construir la actual plaza de toros.
La Mezquita es el único ejemplo de un oratorio islámico preservado en la Sierra. El análisis de este edificio singular sugiere la existencia de una estructura monumental de época romana, posteriormente transformada en una iglesia visigodo-cristiana, manteniendo un carácter monástico hasta la invasión musulmana. Numerosas columnas romanas, capiteles de los siglos I y II, y fascinantes vestigios visigodos del V al VII son testigos de esta evolución histórica. Leer nuestro artículo sobre La Mezquita.
La Iglesia de San Martín, que data del siglo XIV, se enmarca dentro del estilo gótico-mudéjar sevillano, con un pórtico manuelino influenciado por el Rey Don Manuel de Portugal.
La Ermita de Santa Eulalia, a casi 20 km del pueblo, tiene orígenes romanos y alberga interesantes frescos góticos tardíos del siglo XV. La Romería de Sta. Eulalia se celebra el tercer fin de semana de mayo.
Las Fiestas de la Cruz de Almonaster la Real tienen la declaración de Interés Etnológico y están incluidas en el Catálogo General de Bienes Patrimoniales de Andalucía. Celebradas desde tiempos inmemoriales, alrededor del primer domingo de mayo, el ritual es muy complejo. Incluye el rico y competitivo adorno de cruces y alrededores, el protagonismo de las mujeres en estos rituales, y las vibrantes procesiones del domingo por la mañana. Las festividades engloban varios momentos, como el domingo de 'chubarba', la tarde de flores, la noche de los pinos, el 'romero' o domingo de cruces —el acto más visualmente llamativo—, el lunes de cruces y las 'giras', en un ritual largo y complejo
Muchos son los pueblos que conforman el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche, cada uno con algo especial que los hace únicos en su entorno. Mucha historia, cultura, tradiciones en unas poblaciones singulares que han sabido respetar y guardar su idiosincrasia.